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15:43

Soñándome contigo bajo el agua...

Publicado por Unknown |

Despertando de un sueño que reconozco, miro la oscuridad que me rodea y estiro el brazo para alzancar el reloj. Son las cuatro de la mañana, he dormido dos horas solamente. Sin embargo, ni el pesar de la madrugada, ni la pesadilla de la que he regresado, ni mis párpados callados, evitan que me pregunte "¿Qué andarás haciendo ahora?"

Sé que debo despejar mis dudas. Te busqué, pero no obtuve respuesta. Mejor será rendirme y regresar a la cama, con hojas secas y todo.





Qué andarás haciendo ahora

Qué andarás haciendo ahora,
hecha una madeja en el sillón,
dibujando constelaciones en los huecos
de los cuadros que aún faltan por colgar.

Qué andarás haciendo ahora,
apagando las luces del salón,
probándote quizá un vestido nuevo,
planeando una huida, ver el mar.

Y yo afilando lunas, perdido en el hotel,
encontrando tus caricias en el neceser.
Y yo buscándote en el espejo azul del baño,
en la ropa cansada del armario.

Qué andarás haciendo ahora,
cansada viendo la televisión,
guardando mi paz y mis retratos,
la costumbre de dormir al lado izquierdo.

Qué andarás haciendo ahora,
maldiciendo la luz, el primer sol,
hermosa con los párpados hinchados,
regando las plantas, todos los recuerdos.

Y yo retirando hojas secas de la cama,
soñándome contigo bajo el agua.
Y yo recordando que olvidé tender la ropa,
preguntándome qué andarás haciendo ahora.

Letra y música: Ismael Serrano

7:38

y son tantas despedidas...

Publicado por Unknown |


¿Cómo contestaría Ana? 1995, en aquellos tiempos no era cuestión de solamente prohibirnos en el messenger, ni borrarnos del facebook. En aquellos tiempos, estas cercanías era más reales. Quizás, aun ahora, Ana no respondería. Quizás, de verdad la felicidad ha lanzado nuevamente piedras a su ventana; finalmente, es tan corta la vida que no necesita más ayeres ni tantas despedidas. ¿Sería difícil? Quizás en los zapatos de ella, no tanto. Pero ¿qué pasa cuándo es una la que quizá se muera y no tenga que maldecirse jamás? ¿Qué hacer cuando no hay piedras en la ventana por la que nos asomamos? Aquella ventana vacía que no da ni luz, ni paz; sólo sombra, despedidas y un tenue "¿me recuerdas? te extraño" que, actualmente, se pierde en esta maldita jungla electrónica. Yo tampoco deseo más la paz.


Ana Ana, es tan corta la vida, y son tantas despedidas llenas de promesas vanas. Ana, ¿qué será de nosotros cuando caigamos y otros ocupen nuestro lugar? Ana, ¿dónde será la batalla próxima en que perdamos la guerra contra la soledad? Ana, volverás a escuchar las piedras que contra tu ventana lanzó la felicidad. Lanzó la felicidad. Ana, es tan corta la vida, quizás me vuelva mentira y no te conozca mañana. Ana, cuando te esconda un abrazo recuerda entonces el año en que forjamos la paz. Ana, quizás me marche y no vuelva, quizás me muera y no tengas que maldecirme jamás. Ana, te veo y me declaro culpable de desear tu presencia más que desear la paz. Ana, ¿qué hago yo con mis canciones, con el manojo de escarcha, con mis ganas de matar? Ana, ¿qué hago yo con las montañas de papeles que he firmado jurando morir o amar? Jurando morir o amar. Ana. Letra y música: Ismael Serrano